Palermo se prepara para debutar el sábado como técnico dirigiendo al Tomba ante Quilmes. Y reconoce su nerviosismo: “Siento mucha adrenalina. Va a ser un día especial como la primera charla con los jugadores”.
Martín Palermo está a un paso de tener su bautismo como
entrenador. Ese momento que tanto anheló desde que colgó los botines
llegará el sábado, cuando Godoy Cruz enfrente a Quilmes. El Titán
dirigirá por primera vez a un equipo desde el banco y reconoció que se
trata de un momento importante en su vida: “El jugador ya fue. Siento
mucha adrenalina, esperé mucho esto. Ahora soy entrenador y estoy muy
ansioso. Fue muy especial la primera charla con los jugadores y el
sábado será un día especial también”, soltó el flamante DT.
Palermo arribó al Tomba en un momento difícil: acumula ocho partidos sin ganar, con cuatro derrotas consecutivas, y necesita cambiar el aire para no tener problemas con el promedio el próximo semestre. “Asumí antes por la situación en la que se encuentra el equipo y en estos días he tratado de levantarles el ánimo y darles confianza. En circunstancias como estas, hay que apuntar a la cabeza del jugador. Veo mucho compromiso”, explicó Martín la fórmula para salir adelante.
Palermo arribó al Tomba en un momento difícil: acumula ocho partidos sin ganar, con cuatro derrotas consecutivas, y necesita cambiar el aire para no tener problemas con el promedio el próximo semestre. “Asumí antes por la situación en la que se encuentra el equipo y en estos días he tratado de levantarles el ánimo y darles confianza. En circunstancias como estas, hay que apuntar a la cabeza del jugador. Veo mucho compromiso”, explicó Martín la fórmula para salir adelante.